RIO DE JANEIRO. Desde que llegamos a Rio, nos dicenq ue el Parque Olímpico es el corazón de los Juegos Olímpicos, y no se equivocan es prácticamente el sistema nervioso del juego, desde el corazón hasta el cerebro, todo está planeado y pensado, para que sea invadido por miles de de personas cada día desde el sábado 5 hasta el final de los Juegos.
Por eso quisimos entrar, pasear, conocerlo. A un día de que cobren vida estos gigantes de cemento y hierro, paseamos y caminamos sus entrañas, el Estadio Acuático, los trillizos, las tres Arenas Cariocas, el estadio Olímpico, la Arena do Futuro, el tremendo complejo de Tenis, y la casa del básquet, todos estos son las joyas de los Juegos que viven en una nueva ciudad del deporte, creada desde cero en Barra Tijuca, a unas cuantas horas del centro de Rio, de difícil acceso, y eso tiene que ver con la seguridad.
Los sistemas de transporte que nos acercan hasta allá, sólo pueden ser usados por gente acreditada o con entrada del día, y que además tengan un pase llamado el “Cartao dos Jogos”, sólo así se puede acceder a esa zona.
El lugar cuenta además con zonas de fiesta, comida, relax, y dos pantallas gigantes para que nadie se pierda detalle, será una fiesta, el corazón de los juegos comenzará a latir luego de que se encienda la Llama Olímpica.
