Será difícil que en muchos años algún futbolista boliviano logre superar en montos lo que cuesta Marcelo Martins. Su pase del Cruzeiro al Shakhtar de Ucrania en 2008 costó 9.000.000 de euros, cifra récord para nuestro balompié.
Por esas cosas de las negociaciones su fichaje por el Flamengo reportará también un beneficio para el Palmeiras, club de la segunda división brasileña, adonde lo querían enviar como parte de pago por la llegada del argentino Hernán Barcos al Gremio. Sin embargo, como no quiso ir, se asumió el compromiso de darle un porcentaje al club de Sao Paulo por una futura operación.
En este momento, por tanto, los derechos deportivos y federativos de Martins le pertenecen a Gremio, Shakhtar, y Palmeiras, en diferentes porcentajes. La entidad de Porto Alegre lo llevó de nuevo al fútbol de Brasil, sin embargo, todavía debe un par de cuotas al club de la ciudad de Donetsk. Además, estuvo de acuerdo en pagar un salario “europeo” de unos 300.000 dólares.
Gremio tiene el 70% de los derechos deportivos y económicos del jugador, y entregará el 15% a Palmeiras siempre y cuando algún club haga uso de la opción de compra; por su parte, Shakhtar es dueño del restante 30%. El factor económico ocasionó que el Santos de Neymar decidiera bajarse de la puja por contar con los servicios del delantero boliviano.
Flamengo tampoco está en condiciones de pagar esa cifra, pero trascendió que ofreció menos, un poco más de la mitad, aunque obtuvo el visto bueno del jugador. Además, para Martins es una buena vitrina para regresar a Europa. Sólo falta el sí definitivo para que se instale en Río de Janeiro y sea anunciado como refuerzo del “mengao”, como se conoce al Flamengo.
Europa. Los entrevistados en Bolivia sobre las condiciones de Martins opinaron de manera unánime que se trata de un jugador ganador y que tranquilamente puede sellar su segunda incursión en Europa en cualquier momento.
“Un futbolista de sus características, que rinde en la alta competencia y que todavía no ha llegado a los 30 años, puede tranquilamente jugar en Europa. Brasil es una gran vitrina, hay que recordar que hizo experiencia primaria en Europa y sabe de lo que se trata. Me atrevo a decir que volverá a jugar allí y triunfará por su capacidad física y técnica y, sobre todo, por su fuerza mental”, sostuvo Sergio Apaza para quien el tiempo en que estuvo en Vitoria y Cruzeiro ayudó mucho en su consolidación como futbolista.
Carlos Aragonés coincidió con la opinión anterior, aunque señaló que Brasil también tiene un fútbol que está catalogado entre los primeros del mundo y que en este tiempo está en el centro de la atención mundial porque será sede de la Copa de Confederaciones este año y de la Copa Mundial en 2014.
“Está a tiempo de regresar a Europa porque es joven y reúne las condiciones técnicas. Pero Flamengo es reconocido en todo el mundo y como está económicamente el fútbol brasileño, su primer desafío debería ser consolidarse allí. Pienso que debería quedarse en Brasil y demostrar lo suyo en ese país”.
Fuente: La Razón
